Los tres caminos hacia delante de los Maple Leafs

Tres años. Después de no conseguir escapar de la primera ronda de la postemporada de la NHL por quinto año seguido, tres es el número mágico para esta era de Toronto

Tres son las temporadas que les quedan a los Leafs con el núcleo de este grupo de jugadores. Auston Matthews es agente libre no restringido tras la temporada 2023-24. También lo es William Nylander. Mitch Marner y John Tavares son UFA tras la campaña 2024-25. Otros veteranos clave - Zach Hyman, Morgan Rielly, Jake Muzzin, TJ Brodie, Jack Campbell - quedan libres también en diferentes momentos durante los próximos tres años. Algunos firmarán extensiones y otros se marcharán.

La ventana de la Stanley Cup ya se está cerrando para un equipo que, sobre el papel, debería aspirar a las Copas cada año. Recién salidos de la derrota en el Game 7 del lunes ante los no favoritos Montreal Canadiens, estos son los tres caminos que la directiva de los Leafs podría tomar esta offseason. Para ello, se asume que el grupo de liderazgo compuesto por el presidente Brendan Shanahan, el general manager Kyle Dubas y el head coach Sheldon Keefe sigue siendo el mismo.

1. Cambios importantes

Con un 3-1 arriba contra Montreal - un equipo sólido pero no gran cosa - los Leafs se vinieron abajo en las costuras. Fueron inconsistentes en los Games 5 y 6 y después mostraron poca urgencia en el Game 7. Los Habs liderados por Carey Price merecen crédito por la sorpresa, pero la incapacidad de Toronto de terminar el trabajo fue la historia de la serie.

También ha emergido un patrón. En siete partidos decisivos de 2018 a 2021, Matthews lleva un gol y dos asistencias, Marner lleva dos asistencias y Nylander lleva dos goles y dos asistencias. Siete partidos no son una gran muestra, pero no hay tantos partidos de eliminación en la carrera de un jugador.

En cuanto a los cambios importantes, un traspaso que involucre a Alex Kerfoot, Justin Holl o incluso a la promesa principal, Nick Robertson, no moverá la aguja. Matthews, Nylander, Tavares y Marner serían las piezas en cuestión.

Matthews no se va a ir a ningún sitio. Traspasar un goleador generacional sería un error colosal, sin importar las circunstancias. El valor de Nylander nunca ha sido tan alto después de que anotara cinco goles en la serie. Por otra parte, el valor anual medio de $7 millones de su trato se ha convertido en una ganga y los Leafs, cortos de espacio, necesitan gangas. Mientras tanto, el pesado contrato de Tavares es básicamente inamovible.

Eso deja a Marner, que pareció alguien en medio de una lucha psicológica durante siete mediocres partidos de playoff. Fue una sombra del jugador de la temporada regular, agarrando demasiado fuerte su stick y no disparando cuando debería. Su sequía de gol en el playoff se ha alargado ahora a 18 partidos. Quizás es hora de que los Leafs envíen al organizador de juego a otro sitio y reubiquen su salario anual de $10.9 millones en múltiples jugadores. Incluso con su reputación en ruinas, el mercado para Marner debería estar hirviendo y los Leafs necesitan una inyección de profundidad.

Una segunda opción podría ser Rielly. Al primer defensa del club sólo le queda una temporada en su trato y acarrea un cap hit manejable de $5 millones. Rielly fue uno de los mejores jugadores de los Leafs ante los Habs, cosa que hace parecer la idea de traspasarlo ridícula en la superficie - pero si la dirección siente que necesita realizar un cambio sísmico, Rielly representa un verdadero activo de traspaso.

2. Cambios menores

El mejor contraargumento a realizar un cambio importante es que traspasar un Marner o un Rielly significa perder un jugador de alto impacto para la próxima temporada regular y en adelante. Traspasar por el mismo talento no es una tarea imposible en la NHL, pero no es fácil - véase el traspaso entre Jets y Blue Jackets de Patrik Laine y Pierre-Luc Dubois.

Así que, si un movimiento importante se considera demasiado reaccionario, Dubas cambiará probablemente su foco para encontrar una fórmula que pueda acabar con la carrera de 17 años de incompetencia de la organización en el playoff. Dubas ya ha ajustado su plan original, incorporando liderazgo veterano, dureza y defensa durante el último par de años después de empezar su etapa como un GM dispuesto a apostar casi exclusivamente en la habilidad.

Unos pocos cambios menores vienen a la mente:

• Un nuevo entrenador de power play después de que el asistente Manny Malhotra fuera incapaz de arreglar lo que afligía a los Leafs en el último tramo de la temporada regular y en los playoffs.

• Una nueva cosecha de delanteros de fondo de armario después de que unos pocos hombres de los últimos seis, incluyendo a Joe Thornton y a Pierre Engvall, contribuyeran prácticamente nada en los playoffs.

• Un nuevo compañero de portería para Jack Campbell, aunque el pendiente UFA Frederik Andersen estaba camino a la salida mucho antes del colapso contra los Habs.

Los pequeños ajustes son el camino menos atractivo a tomar. Sin embargo, es el enfoque más probable.

3. Mantener el rumbo

Tavares se hizo daño en el Game 1 y nunca regresó. Jake Muzzin se hizo daño en el Game 6 y nunca regresó. Nick Foligno jugó lesionado. Al menos un trozo de los problemas de Matthews y Marner puede ser rastreado a los esfuerzos de cierre de Montreal. No es que los Leafs se ahogaran solos.

No hay cinco equipos en la NHL más talentosos que los Leafs. No sólo deberían escapar de la primera ronda con regularidad, sino que deberían ir lejos. La ejecución es el principal problema y hay unos pocos ejemplos recientes de equipos que llamaron a la puerta durante años antes de atravesarla.

Le costó al ganador de la Copa del pasado verano, los Tampa Bay Lightning liderados por Steven Stamkos, siete años. Los campeones de 2018, los Washington Capitals liderados por Alex Ovechkin, esperaron un década entera. Incluso la selección de moda para la Copa de este año, los Colorado Avalanche, ha sufrido bastantes caídas durante la era de Nathan MacKinnon.

Verdaderamente, todo se reduce a la ventana de contención: Tres años.

Tres años es a la vez poco y mucho tiempo.

~Ferran On Sports~