Los Phils dan comienzo a un gran invierno
Los Philadelphia Phillies han colocado la primera piedra de una offseason renovadora adquiriendo a Jean Segura desde los Mariners.
Philadelphia va a gastar dinero este invierno. Jean Segura es el aperitivo.
Decididos a ser contendientes la temporada que viene después de un prometedor 2018 en el cual su prolongado rebuild comenzó a, más o menos, dar sus frutos - en un 80-82, finalizaron con su mejor récord (y diferencia de carreras) desde 2012 - los Phillies adquirieron a Jean Segura y a los relievers Juan Nicasio y James Pazos de los Seattle Mariners, repentinamente en reconstrucción, el lunes a cambio de J.P. Crawford, shortstop de 23 años, y Carlos Santana, veterano primera base - un ambiguo movimiento beneficioso a corto plazo que presagia una offseason renovadora en la cual firmarán, probablemente, a Bryce Harper o a Manny Machado. O a los dos.
Con sólo alrededor de los $108 millones asignados a su masa salarial de 2019, y sin, virtualmente, ninguna obligación financiera más allá de 2020, los Phillies están preparados para hacer llover el dinero este invierno en la agencia libre, habiendo llegado a la etapa de reinversión de su reconstrucción en el momento prefecto, es decir, con dos talentos generacionales disponibles. Necesitan la ayuda, también, si quieren distinguirse en una cada vez más mejorada división que puede tener cuatro contendientes legítimos cuando llegue el Opening Day.
"Entramos en esta esperando gastar dinero," dijo John Middleton, dueño de los Phillies a Bob Nightengale, de USA Today Sports, en noviembre. "Y quizás incluso siendo un poco insensatos al hacerlo."
Evidentemente, sin embargo, además de su disposición a gastar dinero, los Phillies están ahora preparados para intercambiar la infraestructura de promesas que tanto trabajo les ha llevado conseguir para así priorizar las victorias en las Mayores. Crawford, después de todo, era considerado un pilar del futuro de los Phillies tan recientemente como el invierno pasado. (Puede llegar a ser todavía un jugador decisivo algún día, a pesar de tropezar en una decepcionante campaña en 2018.)
Los avances realizados el pasado verano en el primer nivel del béisbol, no obstante - por el pitching de Philadelphia, en particular - sugiere que el futuro es ahora presente, y la front office está harta de esperar, decidida a rellenar los huecos en la alineación desde el exterior de la organización, ya sea firmando cheques o traspasando activos a largo plazo.
Ese proceso dio comienzo el lunes con la adición de Segura, un shortstop que cumplirá pronto los 29 años en el mejor momento de su carrera, saliendo de una temporada en la que finalizó noveno en su posición en el fWAR (3.8) y obtuvo la segunda nominación al All-Star de su carrera. Desde que zarpó de Milwaukee en 2016, Segura ha golpeado .308/.353/.449 (116 OPS+) en ese periodo mientras acumulaba más WAR que todos excepto una media docena de shortstops: Francisco Lindor, Machado, Corey Seager, Andrelton Simmons, Xander Bogaerts, y Carlos Correa. Puede que sea el mejor position player de los Phillies en este momento.
Ese adjetivo - ahora mismo - es clave.
Después de todo, los Phillies tienen ahora una vacante a rellenar en el jardín izquierdo - Rhys Hoskins, su titular, se desplazará hasta la primera base para reemplazar a Santana - y Harper, casualmente, juega en esa esquina del jardín. Machado, mientras tanto, se considera a sí mismo un shortstop, pero la adición de Segura no privará a los Phillies de perseguirlo; según Nightengale, siguen aún interesados en firmar al cuatro veces All-Star para ocupar la tercera base. ¿Y si no está dispuesto a eso? Bueno, quizá los Phillies considerarían desplazar a Segura a la tercera base y cortar finalmente a Maikel Franco, la gran promesa convertida en comodín. Pase lo que pase, tener demasiados jugadores de primer nivel es un enigma que los Phillies buscan decididamente resolver.
Por ahora, mientras meditan su siguiente golpe, la alineación de los Phillies ha mejorado, al igual que el fondo de armario de su bullpen gracias a las adiciones de Nicasio, cuyo 6.00 de ERA en 2018 ocultó sus sobresalientes periféricos (2.99 FIP), y Pazos, un zurdo que fue autor de un 2.88 de ERA en 60 apariciones la pasada temporada. Y no se han deshecho de ningún activo de élite en traspasos ni tampoco han aumentado su masa salarial para el 2019 (o 2020) por mucho, tampoco.
Francamente, esto es lo que hace este trato tan decepcionante desde la perspectiva de los Mariners. Considerando cuanto ha descendido el valor de Crawford en el último par de temporadas debido a lesiones y su bajo rendimiento en los niveles más altos de las Menores - y, brevemente, en las Mayores - parece ser, fundamentalmente, un vaciado de salario a largo plazo. Y mientras solucionar obligaciones financieras potencialmente complicadas debería ser una prioridad para un equipo en reconstrucción, Jerry Dipoto, mánager general de los Mariners, ha liquidado rápidamente la mayor parte de sus mejores fichas en traspasos - James Paxton, Edwin Díaz, y ahora Segura - sin obtener una verdadera promesa de élite a cambio. Quizá lo obtenga cuando traspase a Mitch Haniger.
Y mientras los aficionados de los Mariners esperan que esta improvisada reconstrucción asegura una verdadera pieza maestra, también esperan con ansia los seguidores de los Phillies la preciada adquisición de su club esta offseason. Segura es un buen inicio. Pero ahora es hora de soltar el dinero.
Sígueme en Twitter @FerranOnSports para más.
Philadelphia va a gastar dinero este invierno. Jean Segura es el aperitivo.
Decididos a ser contendientes la temporada que viene después de un prometedor 2018 en el cual su prolongado rebuild comenzó a, más o menos, dar sus frutos - en un 80-82, finalizaron con su mejor récord (y diferencia de carreras) desde 2012 - los Phillies adquirieron a Jean Segura y a los relievers Juan Nicasio y James Pazos de los Seattle Mariners, repentinamente en reconstrucción, el lunes a cambio de J.P. Crawford, shortstop de 23 años, y Carlos Santana, veterano primera base - un ambiguo movimiento beneficioso a corto plazo que presagia una offseason renovadora en la cual firmarán, probablemente, a Bryce Harper o a Manny Machado. O a los dos.
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Con sólo alrededor de los $108 millones asignados a su masa salarial de 2019, y sin, virtualmente, ninguna obligación financiera más allá de 2020, los Phillies están preparados para hacer llover el dinero este invierno en la agencia libre, habiendo llegado a la etapa de reinversión de su reconstrucción en el momento prefecto, es decir, con dos talentos generacionales disponibles. Necesitan la ayuda, también, si quieren distinguirse en una cada vez más mejorada división que puede tener cuatro contendientes legítimos cuando llegue el Opening Day.
"Entramos en esta esperando gastar dinero," dijo John Middleton, dueño de los Phillies a Bob Nightengale, de USA Today Sports, en noviembre. "Y quizás incluso siendo un poco insensatos al hacerlo."
Evidentemente, sin embargo, además de su disposición a gastar dinero, los Phillies están ahora preparados para intercambiar la infraestructura de promesas que tanto trabajo les ha llevado conseguir para así priorizar las victorias en las Mayores. Crawford, después de todo, era considerado un pilar del futuro de los Phillies tan recientemente como el invierno pasado. (Puede llegar a ser todavía un jugador decisivo algún día, a pesar de tropezar en una decepcionante campaña en 2018.)
Los avances realizados el pasado verano en el primer nivel del béisbol, no obstante - por el pitching de Philadelphia, en particular - sugiere que el futuro es ahora presente, y la front office está harta de esperar, decidida a rellenar los huecos en la alineación desde el exterior de la organización, ya sea firmando cheques o traspasando activos a largo plazo.
Ese proceso dio comienzo el lunes con la adición de Segura, un shortstop que cumplirá pronto los 29 años en el mejor momento de su carrera, saliendo de una temporada en la que finalizó noveno en su posición en el fWAR (3.8) y obtuvo la segunda nominación al All-Star de su carrera. Desde que zarpó de Milwaukee en 2016, Segura ha golpeado .308/.353/.449 (116 OPS+) en ese periodo mientras acumulaba más WAR que todos excepto una media docena de shortstops: Francisco Lindor, Machado, Corey Seager, Andrelton Simmons, Xander Bogaerts, y Carlos Correa. Puede que sea el mejor position player de los Phillies en este momento.
Ese adjetivo - ahora mismo - es clave.
Después de todo, los Phillies tienen ahora una vacante a rellenar en el jardín izquierdo - Rhys Hoskins, su titular, se desplazará hasta la primera base para reemplazar a Santana - y Harper, casualmente, juega en esa esquina del jardín. Machado, mientras tanto, se considera a sí mismo un shortstop, pero la adición de Segura no privará a los Phillies de perseguirlo; según Nightengale, siguen aún interesados en firmar al cuatro veces All-Star para ocupar la tercera base. ¿Y si no está dispuesto a eso? Bueno, quizá los Phillies considerarían desplazar a Segura a la tercera base y cortar finalmente a Maikel Franco, la gran promesa convertida en comodín. Pase lo que pase, tener demasiados jugadores de primer nivel es un enigma que los Phillies buscan decididamente resolver.
Por ahora, mientras meditan su siguiente golpe, la alineación de los Phillies ha mejorado, al igual que el fondo de armario de su bullpen gracias a las adiciones de Nicasio, cuyo 6.00 de ERA en 2018 ocultó sus sobresalientes periféricos (2.99 FIP), y Pazos, un zurdo que fue autor de un 2.88 de ERA en 60 apariciones la pasada temporada. Y no se han deshecho de ningún activo de élite en traspasos ni tampoco han aumentado su masa salarial para el 2019 (o 2020) por mucho, tampoco.
Francamente, esto es lo que hace este trato tan decepcionante desde la perspectiva de los Mariners. Considerando cuanto ha descendido el valor de Crawford en el último par de temporadas debido a lesiones y su bajo rendimiento en los niveles más altos de las Menores - y, brevemente, en las Mayores - parece ser, fundamentalmente, un vaciado de salario a largo plazo. Y mientras solucionar obligaciones financieras potencialmente complicadas debería ser una prioridad para un equipo en reconstrucción, Jerry Dipoto, mánager general de los Mariners, ha liquidado rápidamente la mayor parte de sus mejores fichas en traspasos - James Paxton, Edwin Díaz, y ahora Segura - sin obtener una verdadera promesa de élite a cambio. Quizá lo obtenga cuando traspase a Mitch Haniger.
Y mientras los aficionados de los Mariners esperan que esta improvisada reconstrucción asegura una verdadera pieza maestra, también esperan con ansia los seguidores de los Phillies la preciada adquisición de su club esta offseason. Segura es un buen inicio. Pero ahora es hora de soltar el dinero.
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